11.10.05

STOPENDESA INFORMA
No més Tèrmiques a Cubelles
La sequía echa humo
LA FALTA DE ENERGÍA OBLIGA A ENCENDER
LA TÉRMICA DE SANT ADRIÀ
L. BENVENUTY - 11/10/2005
SANT ADRiÀ DE BESÒS
La sequía obligó ayer a Fecsa-Endesa a poner en marcha la central térmica
de Sant Adrià de Besòs, la de las tres chimeneas, la de las urgencias. Y es
que la acuciante falta de agua, el deprimente nivel de los embalses, tiene a
la mayoría de las estaciones hidroeléctricas del país en el dique seco. Sólo
funcionan a pleno rendimiento las tres del río Ebro. De modo que, según
fuentes de la compañía eléctrica, hay que recurrir a la combustión para
garantizar el suministro, lo que resulta más caro y contaminante que
producir energía a través del movimiento del agua o incluso de un modo
nuclear.
Esta circunstancia se viene repitiendo desde principios de este verano,
cada semana con mayor asiduidad. El problema es que la energía eléctrica
no se puede almacenar y debe producirse a medida que se consume. Las
previsiones se realizan con un día de antelación. Por ello, ayer ascendían
dos grandes columnas de humo hacia los cielos metropolitanos. Una de las
chimeneas está clausurada desde hace un par de años después de varios
episodios contaminantes conocidos en Badalona y Sant Adrià como la
lluvia negra.
Con todo, la estampa pronto pasará a la historia de un modo definitivo.
Fecsa-Endesa quiere acabar con las dos únicas centrales térmicas que
tiene en Catalunya, la de Sant Adrià de Besòs y la de Cubelles, y
sustituirlas por unidades de ciclo combinado, como la que se erige frente a
la adrianense, que producen electricidad de modo más barato y ecológico.
Pero el asunto es complicado y todo depende de futuras decisiones de la
Generalitat, que todavía debe perfilar el plan energético de Catalunya y
establecer dónde se pueden levantar estas instalaciones.
Lo curioso es que, a pesar de haber echado a perder la colada de
centenares de vecinos y ocupar un privilegiado espacio del litoral, la central
de las tres chimeneas se ha convertido en todo un símbolo de Sant Adrià:
fondo de películas, logotipo de festivales y escenario de luchas sindicales
(una bala policial perdida mató a uno de los obreros que la construían allá
por los setenta). No hace mucho, un arquitecto propuso convertirla en
apartamentos. El Ayuntamiento de Sant Adrià pretende desde hace varios
años declararla de interés histórico y cultural, para que nadie la toque
cuando deje de funcionar. Pura historia, pura arqueología industrial
actualmente en servicio por culpa de la sequía.